El desierto de navarra
Muchas veces no apreciamos los grandes tesoros que tenemos cerca de casa, por eso hoy venimos a hablaros de una escapada que hicimos y nos encantaría repetir.
Nos fuimos un fin de semana a visitar Tudela se sitúa en la Ribera de Navarra, al sur, tiene una población de unos 35.000 habitantes y destaca por ser una de las ciudades de origen islámico más importantes de España y Europa.
Tudela es una ciudad para recorrer a pie, mientras paseas te encuentras con historia tanto de origen musulmán, judío o mozárabe. Además la historia de sus calles se puede combinar con lo mejor de la buena mesa, destacando las exquisitas verduras de la ribera.
Nosotras empezamos visitando la plaza de los fueros donde esta la oficina de turismo, nos atendieron genial y nos dieron información sobre la ciudad. Desde esta plaza se organizan visitas guiadas de diferentes características.
El mercado de abastos es visita obligatoria para comprar riquísima fruta de temporada, además de las famosas alcachofas de Tudela.
Otro lugar al que se debe entrar es a la catedral y a su claustro, lugar en el que se respira paz, ya que solo escuchamos el ruido de las cigüeñas que estaban en el campanario. Nos impresionó "la puerta del juicio" de la catedral y sobretodo las columnas del claustro.
Tudela es una ciudad con mucha vida, es muy fácil callejear por la parte vieja tanto a la hora del vermut como a la tarde y encontrar ambiente. Encontramos bares con encanto y pintxos exquisitos,además de personal muy amable.
Como bares originales en los que tomar algo os recomendamos los siguientes:
-La catedral: no os olvidéis de pedir la mini burger con salsa de alcachofa, una delicia.
-L&ele: un bar moderno con ideas muy vanguardistas donde el paladar solo disfruta.
- Letras a la Taza: Un lugar fantástico para apasionadas de la lectura como nosotras, donde combinar libros con vino, la mejor mezcla.
En cuanto alojamientos hay dos que nos encantan, uno es el Hotel Santamaria, situado cerca del centro y el que además tiene una azotea pequeña pero acogedora donde los alojados en el hotel pueden subirse su consumición del bar.
La última vez que estuvimos en Tudela probamos el Hostal Remigio, situado casi en la misma plaza de los fueros. Un alojamiento sencillo y económico para una salida de amigas.
En esta escapada a la Ribera Navarra no podía faltar la visita obligatoria al Parque Natural de las Bardenas, un lugar de un encanto descomunal. La ruta se puede realizar de diferentes maneras, andando, en bici, en moto o en coche. Nosotras la realizamos en coche, ya que la temperatura superaba los 30 grados.
Para más información sobre como visitar este desierto tan carismático os dejamos este link.
¿Conocéis esta zona de Navarra? ¿Habéis visita alguna ves las Bardenas Reales? A nosotros nos encanta este paraíso por lo que volveremos pronto.
